El/la periodista tiene como principal misión suministrar libremente a la ciudadanía toda información veraz y defenderá las libertades de expresión, información y opinión al servicio de una sociedad libre, solidaria, justa y pacífica. Este es el título I del Código Deontológico aprobado en el año 2000 por el Sindicato de Periodistas de Madrid. Y este es el código por el que cualquier periodista ha de guiarse a la hora de publicar sus informaciones. Porque para estar satisfecho de esta profesión hay que superar las barreras que muchas veces intentan poner tanto las empresas privadas como las instituciones públicas. Este artículo número uno está colocado precisamente en ese lugar porque prima por encima de todos los demás.
Pero esto no ocurre sólo con el código deontológico español. Por ejemplo, les ofrezco ahora los artículos 1 y 2 del Codice di Deontologia dei giornalisti italiani: 1. Le presenti norme sono volte a contemperare i diritti fondamentali della persona con il diritto dei cittadini all'informazione e con la libertà di stampa. 2. In forza dell'art. 21 della Costituzione, la professione giornalistica si svolge senza autorizzazioni o censure. (1. Estas normas se emiten con el fin de moderar los derechos fundamentales de la persona con el derecho de los ciudadanos a la información y la libertad de prensa. 2. Ateniéndose al artículo 21 de la Constitución (italiana), la profesión periodística se desarrollará sin imposiciones o censuras). O miren el primer artículo del European Codes of journalism ethics (Código Deontológico Europeo para el periodismo ético): The first obligation of a journalist is to respect the truth. (La primera obligación de un periodista es respetar la verdad). Y les informo de todo esto porque durante las últimas semanas la “tensión informativa” está creciendo en Yecla.
Los profesionales del sector informativo están cumpliendo con creces con su trabajo: informar a los ciudadanos sin dejarse influenciar. Y parece ser que esto no gusta a todo el mundo, pero por algo dicen que somos 'el cuarto poder'.
Ahora que trabajo en Madrid en un grupo de comunicación bastante grande me doy cuenta de lo difícil que es sobrepasar los límites establecidos por los intereses políticos y, sobre todo, económicos. En elperiodicodeyecla.com todavía podemos permitirnos el lujo de trabajar con la libertad que ha de caracterizar a esta profesión. Económicamente no dependemos de un solo ‘proveedor’, sino que dependemos de muchos y pequeños. Por tanto, todavía podemos publicar lo que consideramos necesario para construir una sociedad más justa e igualitaria. He de decirles que todo lo que ha publicado elperiodicodeyecla.com estas últimas semanas es veraz, pues quienes ostentan el poder no han sido capaces de demostrar lo contrario (si lo hiciesen, lo publicaríamos). Y no sé si lo dicho por este medio va a perjudicar a unos o a otros. Quizá eso debían haberlo pensado antes de hacerlo. Puede que cada una de las actuaciones de las que se ha informado en este medio esté dentro de los límites legales, pero no de los éticos y morales. Y los ciudadanos tienen el derecho a saber qué es lo que ocurre para así poder juzgar libremente. Es la primera norma que acepta un político al prometer o jurar su cargo: actuar con total transparencia. Por tanto, puesto que elperiodicodeyecla.com no ha mentido ni ha falsificado ningún dato de los publicados me veía en la obligación de hacer esta aclaración como defensor del lector, pero, sobre todo, como periodista y ciudadano.
Ya lo decía George Orwell, el gran escritor y periodista inglés: “La libertad de expresión es decir lo que otros no quieren oír”
Pero esto no ocurre sólo con el código deontológico español. Por ejemplo, les ofrezco ahora los artículos 1 y 2 del Codice di Deontologia dei giornalisti italiani: 1. Le presenti norme sono volte a contemperare i diritti fondamentali della persona con il diritto dei cittadini all'informazione e con la libertà di stampa. 2. In forza dell'art. 21 della Costituzione, la professione giornalistica si svolge senza autorizzazioni o censure. (1. Estas normas se emiten con el fin de moderar los derechos fundamentales de la persona con el derecho de los ciudadanos a la información y la libertad de prensa. 2. Ateniéndose al artículo 21 de la Constitución (italiana), la profesión periodística se desarrollará sin imposiciones o censuras). O miren el primer artículo del European Codes of journalism ethics (Código Deontológico Europeo para el periodismo ético): The first obligation of a journalist is to respect the truth. (La primera obligación de un periodista es respetar la verdad). Y les informo de todo esto porque durante las últimas semanas la “tensión informativa” está creciendo en Yecla.
Los profesionales del sector informativo están cumpliendo con creces con su trabajo: informar a los ciudadanos sin dejarse influenciar. Y parece ser que esto no gusta a todo el mundo, pero por algo dicen que somos 'el cuarto poder'.
Ahora que trabajo en Madrid en un grupo de comunicación bastante grande me doy cuenta de lo difícil que es sobrepasar los límites establecidos por los intereses políticos y, sobre todo, económicos. En elperiodicodeyecla.com todavía podemos permitirnos el lujo de trabajar con la libertad que ha de caracterizar a esta profesión. Económicamente no dependemos de un solo ‘proveedor’, sino que dependemos de muchos y pequeños. Por tanto, todavía podemos publicar lo que consideramos necesario para construir una sociedad más justa e igualitaria. He de decirles que todo lo que ha publicado elperiodicodeyecla.com estas últimas semanas es veraz, pues quienes ostentan el poder no han sido capaces de demostrar lo contrario (si lo hiciesen, lo publicaríamos). Y no sé si lo dicho por este medio va a perjudicar a unos o a otros. Quizá eso debían haberlo pensado antes de hacerlo. Puede que cada una de las actuaciones de las que se ha informado en este medio esté dentro de los límites legales, pero no de los éticos y morales. Y los ciudadanos tienen el derecho a saber qué es lo que ocurre para así poder juzgar libremente. Es la primera norma que acepta un político al prometer o jurar su cargo: actuar con total transparencia. Por tanto, puesto que elperiodicodeyecla.com no ha mentido ni ha falsificado ningún dato de los publicados me veía en la obligación de hacer esta aclaración como defensor del lector, pero, sobre todo, como periodista y ciudadano.
Ya lo decía George Orwell, el gran escritor y periodista inglés: “La libertad de expresión es decir lo que otros no quieren oír”